La emperatriz de los Etéreos.

Cuentan que, más allá de los Montes de Hielo, más allá de la Ciudad de Cristal, habita la Emperatriz en un deslumbrante palacio….

Bipa no cree en los cuentos de hadas. No le interesa lo que pueda haber más allá de las Cuevas donde habita su gente. Pero cuando su amigo Aer, fascinado por la leyenda de la mítica Emperatriz, parte en un viaje hacia una muerte segura, Bipa irá a buscarlo, arriesgando su propia vida en un mundo de hielo bañado por la luz de la estrella azul, persiguiendo algo que puede no ser más que una quimera. ¿Existe de veras el Reino Etéreo? ¿Existe algo más allá de la confortable seguridad de las Cuevas? ¿O, por el contrario, no hay más que frío, muerte y oscuridad?

Hace ya bastante tiempo leí "Dónde los árboles cantan" mágica y maravillosa historia dónde las haya. Su lectura me hizo aficionarme a los libros de Laura Gallego, podríamos decir que me volví una incondicional suya. Pensé que una escritora que había sido capaz de crear semejante maravilla, no podía defraudarme por mucho que bajara el nivel del resto de sus obras. En cierta manera a lo largo del tiempo ha sido así, tal y cómo yo pensaba, es decir, sus libros no me han defraudado de momento. Aunque tengo que decir, en honor a  la verdad que esperaba un poco más de éste que hoy os traigo.

Es una historia repleta de magia, la primera parte me enganchó bastante, por lo tanto tiene un buen comienzo. Pero cuando Bipa emprende su viaje en pos de Aer poco a poco la lectura se me iba haciendo más pesada. 

Conforme la protagonista perdía fuerzas y se cansaba, de igual manera me sentía yo. Tenía ganas de que llegara a su destino, fuera cual fuera, aunque ello significara un dramático final, cosa que por otro lado sabéis que odio. 

A lo largo del camino se va encontrando diversos personajes y escenarios a cual más variopinto, pero ninguno logró calarme hondo ni llamó especialmente mi atención. Además, creo que uno de los motivos por lo que no me gustó lo suficiente esta parte de la historia es porque Bipa recorre todo el camino sola, obviando a "Nevado" que es una especie de muñeco de nieve gigante que se convierte en su fiel amigo, pero claro, Nevado no habla, así que...

Estoy segura de que si nuestra protagonista hubiera compartido el viaje con otros personajes, el camino hubiera resultado más interesante. Pero claro, la historia es como es y no me la van a escribir a mi gusto.

Lo que me ha hecho subirle un poco la nota, después de mucho meditarlo, ha sido el final.

Éste me ha parecido sublime, de repente comprendes todo, todo cobra sentido, los interrogantes que hay en el aire desde el principio del libro se desvelan ante ti en unas pocas lineas de una forma magistral. 

Es un final sorprendente, muy logrado y creíble dentro de su contexto y género. Esta parte sí me pareció maravillosa y sí reconocí a la autora de "Dónde los árboles cantan".

Me gustaría explayarme mucho más y poder explicar mejor porqué me ha parecido tan redondo y perfecto, pero no puedo hacerlo sin arriesgarme a desvelar detalles que le quitarían toda la magia.

Resumiendo, una obra muy especial que decae un poco en cuanto a divertimento y encanto en su parte central pero con un final que me dejó sin palabras, e incluso llegó a emocionarme un poco. Por lo tanto merece la pena leerlo tan solo por no perdérselo.

  

Aquí os dejo unas imágenes de mi ejemplar de la editorial Alfaguara, es muy bonito con la cubierta traslúcida y lo compré por muy pocos euros porque eran restos de edición. Lamentablemente esta edición ya no se puede encontrar en el mercado si no es de segunda mano.

Mi puntuación es:

Quizás también te interese...