5 de septiembre de 2014

Los chicos del ferrocarril.

Cuando Padre desaparece de forma inesperada, y en extrañas circunstancias, Roberta, Peter,  Phyllis y su madre tienen que abandonar su feliz y holgada vida familiar en Londres para ir a vivir entre estrecheces a una pequeña casita -llamada Tres Chimeneas- en una aldea en el campo. Allí los niños encuentran entretenimiento en una cercana estación de ferrocarril, y hacen amistad con el mismísimo Jefe de Estación, con Perks el Mozo o con el intrigante Anciano Caballero que les saluda puntualmente desde el tren de las 9,15. Pero no logran olvidar el misterio que ha producido tantos cambios en su vida. Madre no quiere decir nada y los chicos saben que es mejor no preguntar pero ¿dónde está Padre? ¿Volverá algún día? 


Este delicioso libro, nos llevará a conocer las aventuras de nuestros tres hermanos protagonistas, unos niños ingenuos, amables y de gran corazón que ven su acomodada vida truncada de una forma bastante misteriosa, para ellos, y que se nos revelará hacia el final de la historia. Aunque algo, sobre lo que ha podido suceder, sí se vislumbra. 

Es una historia tierna, repleta de ingenuidad, como he dicho, ya que hay que tener en cuenta la época en la cual fue escrita (1906) y las costumbres, modo de vida y educación que recibían en aquellos años los pequeños. Al fin y al cabo bastante diferentes, en algunos aspectos, a lo que puede ser en la actualidad. Debido a todo esto, si ubicáramos los hechos en nuestra época, hay cosas que resultan un tanto desconcertantes, como pueden ser algunos arquetipos establecidos en cuanto al perfil o modo de proceder de algunos de los protagonistas que quedarían un poco fuera de lugar en nuestra época pues rozarían el tema prejuicios en cuanto a la posición social, la diferencia entre hombres y mujeres a nivel social, etc. Pero que resultan comprensibles dentro de la época y contexto en los cuales se desarrolla la acción. 

Es un libro que me ha recordado bastante a las obras de la autora Frances Hodgson Burnett, como "El pequeño lord" o "El jardín secreto" reseñado en el blog no hace mucho.

La autora, Edith Nesbit, ha servido de inspiración a escritores de la talla de J. K. Rowlin, Diana Wynne Jones o C. S. Lewis, según han afirmado ellos mismos. 
Y ahora, por primera vez, podemos disfrutar de su obra más significativa en nuestro país gracias a la editorial Berenice. Siempre me resulta muy de agradecer que haya editoriales comprometidas con los clásicos y con obras poco conocidas en nuestro país, que se deciden a recuperarlas y a publicarlas para que todos las tengamos al alcance de la mano y las podamos disfrutar.

Por lo tanto, nos encontramos ante una tierna historia que nos transportará a la Inglaterra de principios del siglo XX de la mano de nuestros entrañables personajes.


Mi puntuación es:



Quizás también te interese...




15 comentarios:

  1. Hola guapetona!!!

    La verdad es que así de primeras... no me llama especialmente. Y no por que no me guste, sino por que ¡¡no tengo tiempo!! jajajaja Así que estoy intentando elegir bien mis lecturas ^^ (a ver lo que me dura)

    Un besote!!

    ResponderEliminar
  2. Ay, tengo muchas ganas de leer este libro desde hace tiempo, soy muy fan de Diana Wynne Jones y de Rowling y me encantan las obras de Frances Hodgson Burnett así que yo creo que me va a encantar!! :D

    un bsote!

    ResponderEliminar
  3. La portada es muy bonita y ya lo que cuentas me gusta así que no lo descartaría para un futuro, un beso

    ResponderEliminar
  4. Leí este libro hace algún tiempo y estoy de acuerdo contigo en que se nota que es de otra época y que se aprecia la ingenuidad. Me pareció un libro muy tierno y que refleja la inocencia de los más pequeños. Y sí, es un placer que haya editoriales que sigan trayendo clásicos ;)

    Saludos

    ResponderEliminar
  5. Totalmente de acuerdo contigo. Inocencia e ingenuidad son las dos características principales de este libro.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  6. Ay qué tierna, cómo me gusta. Igual es lo que necesito después de haberme tragado tres de Thilliez y uno de Connolly, por aquello de no acabar en una habitación de paredes acolchadas.
    Besitos cuchi cuchi

    ResponderEliminar
  7. Pues no me importaría nada tenerlo jejeje parece una monada tanto por la edición como por su historia.
    Un beso!

    ResponderEliminar
  8. Tiene buena pinta, creo que es una lectura con la que yo disfrutaría así que me lo llevo a la lista
    Besos

    ResponderEliminar
  9. No es un tipo de lectura que me guste, así que mejor lo dejo pasar.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Bien, ya sabía que me llamaba pero me has convencido del todo. Yo también agradezco que las editoriales apuesten por traernos este tipo de lecturas clásicas pero menos conocidas por estos lares.
    Besos

    ResponderEliminar
  11. Este libro me gusta mucho. Me encantaría leerlo. Besos.

    ResponderEliminar
  12. Últimamente he leído varios clásicos infantiles y todos me han gustado muchísimo, así que me lo llevo apuntado.

    Un beso!!

    ResponderEliminar
  13. Hola Isabel, vuelvo de mi retiro jeje. Pues tengo que reconocerte una cosa. Si este libro me lo presentas antes de mis vacaciones lo hubiese dejado pasar, pero ahora me resulta entrañable y curioso que voy a apuntármelo, ¿y por qué? debido a las lecturas clásicas que me he leído recientemente.
    Un abrazo!!

    ResponderEliminar
  14. Hola Isabel, encantada de seguirte. Pues este libro tengo ganas de leerlo. Creo que me gustará. Abrazos.

    ResponderEliminar
  15. Qué ganas tengo de leer este!!
    Me encantan los libros de esta editorial, son super monos =)

    Besotes

    ResponderEliminar